El Secreto de la perfumería está en el Sillage

A menudo nos preguntan por el resultado final si se elabora un perfume empleando una formula en la que solo se contemplan aceites esenciales naturales. La respuesta en bien sencilla: puede tener como inconvenientes el sillage o la fijación de la fragancia en la piel.

El sillage es un vocablo de origen francés que proviene de la palabra «estela» y se refiere a aquella capacidad del perfume de dejarse sentir, es decir, al olor que deja una persona tras su paso. Lo que también conocemos como “estela” del perfume.

Sin embargo, este término no está relacionado con la fijación o permanencia del perfume. Lo que también nos preguntan mucho en Aromaniacos: la duración del perfume. El Sillage es, en definitiva, algo que transciende, que transmite emociones desde el silencio, pero que tiene la capacidad de hacerse sentir. El Sillage busca a su vez efectos de ligereza, pureza, elegancia, transparencia y delicadeza, que se hacen notar durante la evaporación del perfume, creando una huella que se mantiene en el tiempo y ofreciendo matices que ni tan siquiera la realidad nos ofrece. Cuando un perfume huele igual en todo tipo de piel, bajo un mismo clima o en diferentes estaciones, la razón debemos buscarla en sus componentes sintéticos y esto pueden ser inspiraciones de la naturaleza lo que llamamos naturales idénticos o bien componentes 100% sintéticos. Si necesitamos que el perfume sea duradero y tenga fijación en piel, los perfumistas tenemos que recurrir, en ocasiones, a fijadores que son sustancias sintéticas, como por ejemplo ocurre con el ámbar o el almizcle o musk, ya que de otra forma, sin la intervención de estos componentes los perfumes no durarían. No podemos olvidar que también existen fijadores naturales, como por ejemplo lo ha sido a lo largo del tiempo desde los orígenes de la perfumería la civeta, que se extraía de las glándulas anales de los cuadrúpedos que llevan su nombre, específicamente de los machos que utilizan esta sustancia fétida para marcar su territorio. En la actualidad esta sustancia animal está actualmente prohibida. Lo fijadores son utilizados en la elaboración de perfumes para anclar aceites esenciales de bajo peso molecular y por tanto más susceptibles de volatilizarse, además de retardar la evaporación, en su mayoría dan mayor estructura y redondez a las fragancias, incluso aportando su aroma particular enriqueciendo de esta forma la nota final.